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AGENCIA DE NOTICIAS ANDINA

Funcionaria del JNE: en fiscalización somos los malos de la película

Yessica Clavijo dirige “los chalecos rojos”, un ejército de fiscalizadores del JNE que no se casa con nadie

Historias de servidores públicos que tienen la roja y blanca en el pecho

Susana Mendoza Sheen

Publicado: 2020-03-11

Yessica Elisa Clavijo Chipoco es directora nacional de Fiscalización del JNE y ha participado en 34 procesos electorales nacionales, incluyendo los comicios congresales extraordinarios 2020. Su experiencia le permitió liderar la elaboración del proyecto de Ley del Código Electoral del JNE 2019, que el Congreso de la República aún no ha aprobado. 

Nació en Tacna, la tierra donde comienza nuestra patria, y desde pequeña sintió que lo suyo era ayudar a la gente. Yeca, como le dicen de cariño, abrazó la carrera de abogacía sin saber que velar por el respeto a las normas sería su aporte para defender la democracia.

Desde la dirección nacional de fiscalización y procesos electorales del JNE tiene la misión de asegurar a la población que la institución respetará las normas electorales y garantizará la transparencia y limpieza de los comicios.

Lo logra transmitiendo sus conocimientos y pasión a la legión de jóvenes que forman parte de “los chalecos rojos”, el ejército de fiscalizadores con los que trabaja y a los que enseña a no “casarse con nadie”. 

Normalmente son 300 los que recorren las ciudades, distritos, pueblos y centros poblados del país con la finalidad de asistir y capacitar a la ciudadanía que requiere de una elección justa, ya sea consulta popular, designación de dirigentes y, cómo no, comicios generales, regionales y municipales.

Si las jornadas electorales son nacionales, “los chalecos rojos” llegan a 8,000, pues tienen que estar presentes en todos los locales de votación. “Les recuerdo que hay que trabajar en equipo, pues en campo son nuestros ojos y oídos. Su labor nos sirve para elaborar informes documentados. Antes presentábamos solo actas, y hoy adjuntamos fotos y videos que les sirven a los jurados especiales electorales”.

Derecho de piso

Antes de llegar a la sede de Lima, Yessica empezó a trabajar como practicante en el JEE de Tacna conectando computadoras. Su primera tarea como asistente la cumplió con diligencia, a pesar de que en casa no tenía una y sus tareas universitarias las hacía desde una cabina de internet.

Era el 2002, qué iba a imaginar que después de cuatro años viajaría a la capital con la intención de ser fiscalizadora de campo como lo era en Tacna, pero el destino tendría elegido para ella otro lugar y experiencia: trabajar con la primera mujer que asumió la dirección de fiscalización en el JNE, y que fue su inspiración laboral.

“Fue la licenciada Roxanna Villarroel Mansilla quien me dio la oportunidad. Con ella no solo reafirmé mi vocación de servicio, sino que también tomé conciencia de la capacidad que teníamos las mujeres de asumir cargos que siempre estaban en manos de los varones. Tenía 27 años”, recuerda. 

Conciencia de servicio

Entonces aprendió a elaborar directivas, normas, y observó que su compromiso rendía frutos para el país. Yeca reconoce que las barreras burocráticas afectan las tareas de fiscalización y que el Estado les paga para servir a la ciudadanía.

“El Estado siempre tiene que trabajar más en todos los ámbitos: reclutar personal idóneo, ver la mejora continua de procedimientos, capacitar personal. La fiscalización no es bonita, somos los malos de la película, pero debemos defender la democracia.”



Escrito por

Susana Mendoza Sheen

Revelar la existencia de servidores públicos con vocación de servicio, es una forma de conjurar la desconfianza que se tiene del Estado.


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La peor de todas

Un blog de Susana Mendoza